miércoles, 24 de julio de 2013

Dubái

Ya estamos de nuevo en el aeropuerto de Dubái esperando a que salga el vuelo a Singapur.
El vuelo de anoche fue tranquilo. La pantallita de cada pasajero venía con montones de pelis, series, documentales y juegos para pasar el rato. Si hasta tenía enchufe para cargar el.móvil o el portátil!

Hemos llegado prontito por la mañana a Dubái. Es una ciudad cuanto menos curiosa. Como estamos en pleno Ramadán no hemos podido ver la zona antigua. Los comercios estaban cerrados y la humedad y el calor han hecho que a los 10 minutos de pisar la calle por primera vez hayamos regresado al metro, en ocasiones extremadamente refrigerado, a refugiarnos.

Comprobar que los comercios pequeños estaban cerrados y este insoportable clima han logrado que modificáramos el plan de acción. Directos al Emirates Mall. Centro comercial con pista de esquí, restaurantes cerrados y ni un solo asiento!! Al ratito tiramos para el Dubái Mall , y esto sí son palabras mayores ...
Es el mayor centro comercial del mundo,  con 111 hectáreas y más de 1200 tiendas. Merece la pena visitarlo, no como el anterior...
Tiene un acuario enorme y hasta arriba de bichos, pista de patinaje sobre hielo, unas cascadas bastante chulas, la famosa fuente de Dubái en su exterior (expectáculo que merece mucho la pena ver. Cada tarde a partir de las 18:30, cada 30 min. Dura unos 5 minutos. En Ramadán a partir de las 19:30)
Además justo al lado se encuentra Burj Khalifa, el edificio más grande del mundo con 828 metros de altura.
Burj Khalifa
Hemos subido a ver las vistas desde él, y aunque es caro (17 €/persona), hay que comprar la entrada con antelación por internet y sólo subes hasta los 452 metros, merece la pena. Hay una neblina constante, pero aún así hemos visto el famoso "the world".


Lo mejor de todo es que desde el metro al Mall y luego de este al Khalifa no hay que pisar la calle, pues ya se han encargado de hacer una pasarela inmensa, cubierta y refrigerada.

Lo malo del día, que el Ramadán nos ha afectado por completo. No hay donde comer y cuidadito con que te vean hacerlo o beber agua... conclusión casi todo el día en el Dubái Mall haciendo visitas recurrentes al baño para comer algo e hidratarnos. Eso sí, a las 19:20 se abre la veda y los restaurantes se ponen hasta la bandera. Hemos podido cenar en una terraza desde la que hemos visto el espectáculo de la fuente!
Respecto a cómo vestir en Ramadán basta con cubrirse las rodillas y los hombros, aunque en el Dubái Mall te lo pedirán siempre. Pero nosotros hemos visto muchísima gente incluso de aquí que no hace ni caso... no hemos percibido ningún ambiente chungo. Pero sí que no podrás comer / beber en público.

Nada más por hoy, con sellito nuevo en el pasaporte y restos de su moneda sólo nos queda esperar a embarcar en el Airbus 380, sí, el avión más grande del mundo... como todo aquí en Dubái, ciudad que a mi gusto no vale nada, pero que tiene ciertos imprescindibles como los citados y los que no habremos podido descubrir.

1 comentario: